viernes, 28 de octubre de 2011

tornasolado

Cuelga un pelo de la mochila que está en el maletero del colectivo. Un pelo que fue mío pende de mi mochila y lo veo de pie a la hora en que todos vamos de pie en transporte interurbano un lunes a los trabajos. Curva, contracurva, curva, curva; termina en rulo (de fondo la ventana que mira al este), y el sol saliendo lo torna-sola. Y el ómnibus andando lo torna-móvil. Se mece mi cabello frente a mí y lo siento libre, suelto, largo. Ante una frenada conoce el volar, pero sin dejar de pender.

Pelo pende ya no en mi espalda, entre dos pasajeros sentados que no saben de él. Pelo ama pender y dice que implica amplitud circular de acción.
Pender y trenzas, antónimos para los cabellos.

“…gracias pelo, caballo, 
mandarino…”.
Oliverio Girondo
                              
                   

martes, 18 de octubre de 2011

azul celeste



No me había dado cuenta de que hay tantos jacarandaes, olmos, tipas y moreras en Córdoba.
Ni que el dolor de cabeza para mi es rosa.


Cuando me levante de la siesta y este lloviendo, ese día, como hoy, voy a llorar.

miércoles, 12 de octubre de 2011

dorado


“(…) lo que aun no tiene forma me protegerá”.
Roberto Bolaño
(De "La Universidad
Desconocida")

Saluda con una sonrisa de ojos negros grandes y muestra un elefantito dorado tan chiquito como la yema de su índice, lo encontré recién seño. Después toca el violín con el elefantito en la palma de mano izquierda sin que se le caiga. Uñas largas, dedos sucios, elefantito en la palma y las quejas de siempre de no estar en el recreo, pero toca sin parar como nunca antes.
Se va con otra sonrisa de ojos negros; vuelve enseguida corriendo y lanza rodando por el piso una bolita de vidrio blanca salpicada con lengüitas naranjas, verdes y amarillas. Tome seño.
Los compañeros dicen que llevaba esa bolita a todos lados.
Ahora, elefantito en la palma.